Según datos de Applicaster y Penthera, el contexto provocado por la COVID-19 ayudó a que la adopción de los servicios de streaming se adelantara casi cinco años, no solo por la necesidad de encontrar contenido para consumir, sino también porque es más cómodo que tener televisión por cable. De hecho, el número de personas que pagan por Internet y abandonan su sistema de televisión por cable ha aumentado un 15% en los últimos años, según Eje de datos.
Si tenemos en cuenta los datos de Applicaster y Penthera, que encuestaron a profesionales de OTT y proveedores de servicios, el 33% espera que sus plataformas crezcan de forma orgánica en función de las tendencias observadas en los últimos meses. No solo eso, sino la mayoría de ellos estima que el crecimiento oscila entre el 25 y el 50%.
La mayor adopción de OTT, implica mayores cargos por los servicios, sino también mayores oportunidades de experimentación a la hora de elegir sus modelos de monetización. Ahora hay una masa crítica de público que espera ser conquistada por la mejor oferta en términos de contenido y precio.
La mayoría de los proveedores tienden a elegir entre AVOD, SVOD y TVOD, pero varios ya están migrando a modelos híbridos que les permiten cobrar un «precio de entrada» más bajo para acceder al contenido, como HBO MAX, que ofreció un descuento de lanzamiento del 50% como precio de oferta en América Latina a los suscriptores durante el primer mes, un valor que se mantendría durante la duración de su suscripción.
Según los encuestados, el cambio ya se está considerando: el 27% del total del plan es cambiar a un modelo AVOD+ SVOD, lo que permite a los usuarios tener ingresos básicos, pero reduce el precio y aumenta la monetización de las ventas de publicidad.
En otros casos, tenemos plataformas que pasan de ser AVOD + TVOD a ser gratuito, pero también existe la opción de cobrar una «tarifa» por acceder a contenido exclusivo. En este último caso, tenemos el ejemplo de Disney + que, aunque utiliza un modelo SVOD, tiene contenido exclusivo bajo el alero de su 'Acceso Premier'al que se puede acceder pagando un extra, el contenido se convierte en PVOD (vídeo premium a pedido). Este último también es un modelo que se está evaluando, porque se trata de estrenos exclusivos que se estrenan al mismo tiempo que en las salas, restando ingresos a la taquilla tradicional.
Los experimentos con modelos ya han comenzado y los principales actores de la industria están probando nuevas alternativas. YouTube está probando YouTube Premium Lite en países europeos, por un precio inferior al de YouTube Premium, este plan te permite saltarte los anuncios, pero no da acceso a contenido exclusivo. HBO MAX acaba de lanzar un nuevo plan de bajo coste en EE. UU. que incluye publicidad y limita el contenido a 1080p. Por su parte, Spotify ideó «Spotify Plus», que permite escuchar música y elimina los límites para saltarse canciones, pero mantiene la publicidad.
Teniendo en cuenta estas cifras, formulamos la pregunta sobre nuestro LinkedIn y El 18% de los encuestados dijo que optaría por un modelo híbrido si, por ejemplo, una plataforma como Netflix les ofreciera.
El momento del cambio es ahora, los usuarios son cada vez más conscientes de la oferta de contenidos y servicios, pero también tienen en cuenta el coste de la misma. La oportunidad de conquistarlos va acompañada de la elección de un modelo de monetización adecuado. Esto es más importante que nunca, cuando las personas vuelven a la normalidad y los servicios deben luchar para no perder los usuarios que han ganado debido a la pandemia (se estima que la pérdida ronda el 30%).